Del pacto
de puntofijo y el valor de los consensos
Hoy
31 de Octubre, se cumplen 57 años de lo que quizás fue el avance político más
importante de la historia de nuestro país: el pacto de puntofijo. Mucho se ha
hablado alrededor de este evento histórico durante el período del chavismo.
Bajo la narrativa dialéctica del bien y el mal, se ha buscado desde el
liderazgos chavista, estigmatizar al pacto de puntofijo como un pacto de elites
usurpadoras del poder. Pero, veamos en verdad que fue el pacto de puntofijo, de
que sirvió, y porque fue tan importante.
En
este acuerdo se encontraban involucrados todos los factores políticos y
gremiales de Venezuela: los partidos políticos, la iglesia católica, los
sindicatos, los empresarios, entre otros. En definitiva, se llegó a un acuerdo
nacional de todos los actores de la sociedad acerca de cómo debía funcionar el
país. Esto permitió gobernabilidad y estabilidad, permitió, en definitiva,
consolidar el modelo democrático en nuestro país.
En
estos momentos en Venezuela, de crisis política, de conflictividad y tensión,
lo que necesita Venezuela en este momento es precisamente un pacto político, un
acuerdo de conciliación nacional, donde todos los actores políticos de nuestro
país acuerden el funcionamiento general del Estado, la redistribución
equitativa de las riquezas y la apertura del mercado nacional e internacional.
Este
acuerdo, esta especie de pacto de puntofijo del siglo XXI, debe contar con 4
estandartes fundamentales: la reinstitucionalización del Estado, la
reconstrucción del aparato productivo nacional, la modernización universitaria,
y la paz y el consenso. En definitiva, la construcción de un país moderno,
fundamentado en la libertad y el conocimiento, donde cada individuo pueda superarse y competir a través de sus propios medios y sin la ayuda del Estado. Pero, para llegar a esto se requiere
de muchísima madurez política, y voluntad, de los actores políticos de la oposición,
entiéndase: partidos políticos, empresarios, sindicatos, movimientos
estudiantiles, y demás; sobre todo para lograr posicionar estos acuerdos en la conciencia colectiva de los venezolanos, entendiendo que hemos vivido más de 16 años de populismo y clientelismo. Si logramos conciliar entre estos actores, un modelo de
país, una visión de futuro, entonces, el final del régimen chavista estará más
cerca, y el amanecer de la democracia a la vuelta de la esquina.
Alejandro Conejero
@ConejeroC
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